Contratos de Formación sin Certificados de Profesionalidad, ¿Hasta cuándo?
La Directora General de empleo, la Ministra de trabajo, y el propio Gobierno están encantados con los miles de Contratos de Formación y Aprendizaje que se firman cada mes, y que está contribuyendo bastante a la reducción del paro juvenil en España.
De todas las partes es conocido que la formación que se ha impartido y que actualmente se sigue impartiendo en este tipo de contrato “brilla por su ausencia”, se hace con la modalidad a distancia y se concreta en el envío de un libro, la realización de unos test y poco más.
Los gobiernos anteriores han estado muchos años preparando los Certificados de Profesionalidad, y ha sido el actual, el que ha dado el último impulso para autorizarlos en la modalidad de teleformación, con exámenes y tutorías presenciales, para precisamente, introducirlos de forma obligatoria en la formación de los aprendices con el objetivo de mejorar la calidad de la formación que reciben estos y que terminen con una Titulación Oficial con Reconocimiento Laboral.
Está todo legislado, todo publicado en el BOE, las empresas desarrolladoras de contenidos han hecho grandes esfuerzos en subirse al carro de esta teleformación teórico-práctica, que era la gran asignatura pendiente de la formación en España. Las empresas de formación han presentando proyectos al Servicio Público de Empleo para su homologación, pero llevamos todo el año 2014 sin que se produzca ninguna acreditación de este tipo de formación, y lo que es peor, sin tener del todo claro cuál es el motivo.
Los aprendices de este país no pueden seguir formándose como se formaban a mediados del siglo pasado, es decir, por correspondencia; cuando todos tienen ordenador, tablet y móvil de última generación, y ya existe un modelo de teleformación aprobado por la administración, como resultado de muchos años de análisis y trabajo, donde por fin se puede ver implantado en España el tan elogiado sistema de formación dual Alemán.
Los Servicios Públicos de Empleo deben acreditar ya a las empresas que proponen y presentan una formación de calidad en los Certificados de Profesionalidad en la modalidad teleformación, y acabar de una vez por todas con un modelo formativo de aprendices cerrado a unas cuantas empresas desde hace más de veinte años, sin que nadie pueda incorporarse a él. Y lo más importante, mejorar de una vez por todas, la calidad de la formación que reciben los aprendices españoles y la validez de su titulación.
Juan Cruzado