De la formación tradicional a la «escuela 2.0»

Para nadie es un secreto la revolución social on-line en la que estamos inmersos en la actualidad. La educación, como pilar esencial de la sociedad, no puede quedar al margen y está abriéndose camino hacia nuevos horizontes tecnológicos con fines pedagógicos descubriendo el potencial que todas las herramientas y su  influencia en el desarrollo de las actividades de aprendizaje on-line. Vivimos un presente donde los estudiantes son «Usuarios 2.0” una tendencia que no hará sino crecer en un futuro próximo.

En este sentido la metodología On Room permite acercar la formación de calidad a personas que, por su lugar de residencia o por sus circunstancias especiales de ocupación u otras, tienen difícil el acceso a este tipo de programas, democratizando así la formación superior, haciéndola más accesible.
Para conocer de primera mano el funcionamiento de este novedoso método nos hemos acercado a Francisco Manuel Mancera, profesor en Vértice Business School, para que nos cuente sus impresiones sobre esta forma de aprendizaje.

1.       Desde su punto de vista, ¿Cómo definiría la metodología On Room?

La metodología On Room es el resultado del esfuerzo de adecuar los servicios de formación a este nuevo reto, integrando lo mejor de la formación presencial y la formación on line tradicional.

2.       Como formador, ¿Qué ventajas destacaría de este método de aprendizaje?

Nos permite una interactuación de docente y alumnos de calidad, independientemente de su ubicación. Es evidente, que con la metodología On Room el material docente ha dado un salto exponencial, tanto es así que hasta la formación presencial se ha visto obligada a copiarnos… ya no se entiende ninguna sesión formativa (presencial o virtual) sin que los alumnos estén delante del ordenador.

3.       Y para los alumnos, ¿Qué ventajas cree que reporta esta novedosa manera de aprender?

La principal ventaja es la desubicación y la destemporización de la formación. No es sólo que el alumno elige el momento y el lugar en que se forma sino que tiene a su disposición “revivir” las sesiones.

Los alumnos, a pesar de poder estar físicamente separados, se ven “obligados” a trabajar en grupo, lo que supone el desarrollo de una aptitud que el mercado laboral exige.

4.       En su opinión, ¿Cree que el público (a nivel general) está sensibilizada con este tipo de formación? O por el contrario, ¿cree que la gente sigue siendo partidaria del método tradicional de aprendizaje tradicional?

Desde mi punto de vista, tendríamos que diferencia al público en dos grandes bloques. El primero es el bloque de los potenciales clientes que no han dado el salto al universo 2.0. Para poder llegar a él, es necesario que primero se sumerja en este universo. El segundo bloque, los usuarios del universo 2.0 y que además quieren cubrir una necesidad de formación, en algunos casos si pueden seguir decantándose por la formación tradicional, por desconfianza a la “escuela 2.0”.

5.     Tras su experiencia como formador, ¿Animaría a otros profesionales a unirse al equipo de docencia On Room?

No es que los anime, es que es el futuro, quien no se suba a este tren, se quedará en un andén fuera de servicio. La demanda de profesores presenciales se irá reduciendo sistemáticamente, sobre todo en la formación no obligatoria, es decir aquella en que el alumno elige cursarla por propio voluntad.

En términos empresariales; el brutal incremento de productividad del profesorado que permite la metodología On Room permite una reducción de costes ó incremento de la calidad del producto, al alumno, que la formación presencial jamás podrá igualar.

6.      A modo de conclusión, ¿Qué puntos nos destacaría de la metodología On Room?

La metodología On Room representa el primer paso de la universalización la formación actualmente denominada superior. Es el Ford T de la educación, la democratización de los “cursos expertos” en un primer paso y en un segundo paso, de toda la formación no obligatoria. Es una espiral sin freno, las crecientes mejoras tecnológicas, reducciones de precio de hardware y de la conectividad proporcionada por las empresas de las “telecos” va a permitir enriquecer la plataforma de formación y la experiencia del alumno en la “clase”. Eso va a requerir un tremendo esfuerzo, de actualización y mejora continua de la metodología On Room para extraer todo el valor para el alumno, que cada avance permita.

 

on room

 

Por Departamento Social Media

5 comentarios en “De la formación tradicional a la «escuela 2.0»

  • el 21 enero, 2016 a las 5:54 pm
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    Pienso que queda un largo camino por recorrer. Que la gente como el experto de la entrevista lo ve desde dentro, y trasmite con una seguridad notable la importancia de este tipo de formación.
    Pero aún hay que cambiar muchas mentalidades para que esto sea real. Desde los que tienen capacidad para desarrollar políticas de educación, hasta los profesores/as más obsoletos, pasando por los alumnos/as más reticentes a cambios y también desde las empresas, plataformas y academias de formación e-learning.
    Para dar una proyección positiva de los que significa la educación on line y de su metodología se debería realizar a nivel de empresas que se dedican al sector una publicidad conjunta. Imagino que podría ser una agrupación de empresas y plataformas que se dedican a este sector las que podría dar este tipo de mensaje a través de canales y medios de comunicación de masas (ejem: anuncio TV). Donde en primer lugar se garantizara que los contenidos de los cursos y los títulos concedidos son de total garantía y oficialidad.
    El problema viene cuando la gente empieza a desconfiar, porque ante el vacío legal que existe con respecto a los títulos ofertados, algunas empresas anuncian cursos con un titulo específico que solo puede ser expedido de forma oficial por organismo público, con lo cual después no te sirve de nada.
    Este es un ejemplo de entre otros que desacredita la formación e-learming. Se debe luchar contra esto, creo que desde las propias empresas del sector.

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    • el 25 enero, 2016 a las 2:58 pm
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      Exactamente esto conlleva un cambio y adaptación de todos los roles, pero el resultado es interesante y todo un futuro de la educación.

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  • el 24 mayo, 2016 a las 11:05 am
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    El mundo de la formación ON- ROOM está por venir , aunque el autor, lo toma como algo presente, en mi opinión está aun por venir. No quiere decir que no sea una realidad, sino que hay que adaptarse a la nueva revolución que supondrá este tipo de formación e-learing, aunque visto lo visto, su acercamiento a la sociedad se hará rapido ya que las ventajas que ofrece supera con crece sus desventajas.
    En definitiva, Un nuevo mundo de la educación se aproxima y hay que aprender de el!!!

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  • el 28 julio, 2017 a las 2:19 pm
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    Efectivamente, raro es que se contemple un curso hoy día en el que no se incluya de alguna manera el uso de las nuevas tecnologías y todas las materias se están encaminando a que puedan ser realizadas mediante cursos online o onroom. Pero creo que todavía hay campos en los que el autor se equivoca, ya que precisamente yo imparto cursos en los que, por ley, se exigen unas practicas (cursos de patron de embarcaciones y mecanica de enbarcaciones) en los que, aunque existen simuladores, se pide para la expedición del título el hecho constatable de haber estado por lo menos navegando un número determinado de horas, y, en mi parecer, bajo muy buen juicio.

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  • el 23 noviembre, 2017 a las 10:51 am
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    Aun estando de acuerdo en que no se puede obviar las tenedencias del mercado y la sociedad, tenedentes a una expasion de la formacion online, no estoy de acuerdo con el autor en que la educascion presencial este destinada a desaparecer, o tener un papel meramente testimonial. No sabemos lo que el futuro no s depara, y quizas ese tipo de formacion evolucione de manera que se haga mas atractiva. Igualmente, no todos los intentos de digitalizar la informacion han supuesto la desaparicino de los metodos o soportes tradicionales. El caso de los libros digitales frente a los tradicionales impresos demuestra que no todo el mundo esta convencido. Por otra parte, no todo el mundo puede querer asistir a clases presenciales en las que sea imprescindible el uso de ordenador o similar.

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